Párrafo 20.25
20.25 “Recordaba aquellos hombres que llegaron a modificar su cuerpo para sorprenderse, alterando los misterios de la geometría divina, aquellos que devoraban y vomitaban en irreverencia los alimentos. Eran los mismos que querían parar el péndulo de Cronos, rellenando con plásticos las letras que la vida marcaba en la piel. En aquel tiempo los tecnólogos se habían vestido de científicos tratando de imponer el pensamiento único. Muchos médicos habían olvidado que heredaron el nombre de los sacerdotes medos, y ejercían su oficio de manera desacralizada, arropados en la confianza ciega que por todos los rincones pregona. Publicaban sus conocimientos, absorbidos de la Ciencia, pero eran incapaces de confesar las inmensas parcelas de ignorancia.”
COMENTARIO DE EL AVENTURERO
Prometeo nos recordaba a nosotros. Tal vez por ello se aventuró a ayudarnos, para que no quedásemos atrapados en las cárceles del pensamiento único y la ignorancia olvidando que él nos entregó el fuego de los dioses, símbolo de la combustión de nuestras células y del prana, dador de vida y de inteligencia.
¿Será que gracias a este fuego podemos ser conscientes de que hay otras realidades?
Está la humanidad tan perdida y lejos de su esencia, que el Titán quiso ayudarla… tal vez el autor nos recuerda de nuevo este momento, porque se repite… podemos recuperar la consciencia del fuego de los dioses, para desarrollarnos y evolucionar, para desarrollar nuestra inteligencia y recuperar el conocimiento antes establecido y ahora perdido y convertirnos también en héroes y seguir alentando a la humanidad hacia otras realidades.
Prometeo, “redentor de la humanidad”, dios rebelde cuyo amor por el hombre le llevó a realizar un sacrificio… nos sigue entregando el fuego de los dioses cada día…
Un rapto del fuego para la inteligencia y la consciencia que estamos ignorando y tal vez despreciando.
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1 Comentario
Rafa
14 abril, 2022Como muchos sabreis la piel es todo un escaparate de las emociones y de las reacciones químicas que se producen en nosotros, es el órgano mas extendido del cuerpo y habla de los conflictos mas de lo que parece.
Brotes de psoriasis o erupciones en algunas personas, como las pupas que tiene el individuo del dibujo de referencia, se suceden en la piel ante una temporada de exámenes, una mudanza o un divorcio,
En época de guerra hay gente que pierde el pelo o tiene fuertes dolores o picores en momentos de estrés.
El enamoramiento o la verguenza puede desencadenar rubor y un examen, una sudoración descontrolada en las manos.
Actualmente intentamos tapar o disimular estas expresiones para aparentar personas que no somos.
La locura de la estética ha llegado al extremo de que el botox se ha convertido en un símbolo de estatus, lo que representaba hace años un visón por ejemplo.
Existe una nueva disciplina, la neuroestética que trata de corregir lo que nuestro sistema nervioso y nuestras neuronas han determinado que existan.
El culto a Zoroastro, ligado a la medicina a la que relacionaba con la religión, convertía al sacerdote en médico.
Desde los Medos, se fué asimilando por Grecia y el desarrollo de la medicina la demostración de la idea del microcosmos; que el hombre representa el mundo en miniatura y la teoría de que toda enfermedad es el desequilibrio de los líquidos orgánicos.
El Avesta como libro sagrado, contiene gran número de enfermedades de la piel, mentales, febriles, enfermedades específicas de las mujeres, etc. Y se encuentran salmos y palabras de curación.
Como se puede comprender ante la contradicción de las dos concepciones, parece que actualmente además de un intento de detener el tiempo, se pretende romper la sincronicidad espiritual, que nos dá señales en nuestra vida cuando necesitamos una respuesta.
Sincronicidad que no es fruto de la casualidad, sinó de geometrias sagradas, de patrones para todas las formas vivas que van conformando nuestra realidad.
Producto de una sociedad que busca romper con su esencia aparentando saberlo todo.
Un abrazo